El Just in time crea un sistema de cambios rápidos, el SMED (Single Minute Exchange of Dies), que al reducir drásticamente los tiempos de preparación deja sin consistencia la necesidad de trabajar con grandes lotes
de producción.
Nace como un conjunto de conceptos y técnicas que pretenden reducir los tiempos de preparación hasta poderlos expresar en minutos utilizando un solo dígito, es decir, realizar cualquier preparación de máquinas en un tiempo inferior a los 10 minutos.
El sistema SMED debe ser considerado como un método de mejora continua, siendo su fin último la eliminación misma de la necesidad de preparación: “el modo más rápido de cambiar una herramienta es
no cambiarla de ninguna forma”
Eliminar esta necesidad implica:
- Estandarizar los componentes para que puedan ser utilizados en distintos productos
- Fabricar las piezas necesarias al mismo tiempo:
- ya sea en la misma máquina, usando máquinas capaces de fabricar varias piezas al mismo tiempo
- o bien en máquinas diferentes, utilizando varias máquinas de bajo coste
Fases del SMED
- Fase 1: Estudio de la situación actual
- Fase 2: Separar la preparación interna de la externa (Son las partes de la preparación que permiten que la máquina siga funcionando, evitándose que la máquina esté parada más tiempo del estrictamente necesario)
- Fase 3: Convertir la preparación interna en externa (Son aquellas partes de la preparación que exigen que la máquina esté parada)
- Fase 4: Perfeccionar todos los aspectos de la operación de preparación
- Fase 5: Estandarización